Educar en Valores

Educar en valores va mucho más allá de transmitir buenos modales a los niños. También es importante enseñarles a distinguir las buenas de las malas actitudes y ayudarles a desarrollar su conciencia moral. Obviamente, no es una tarea fácil, pues no solo es necesario inculcar determinados valores sino también promover una actitud crítica.

Cuentos con valores y sabiduría  

Cortometrajes

 

Para ser honestos con las personas que te rodean, primero hay que serlo con uno mismo. Este valor se manifiesta a través de una partida de ajedrez en la que un anciano juega contra sí mismo. ¿Quién ganará? Resulta esencial para mostrar a los estudiantes el valor de no engañarse a sí mismos y mostrarse tal como son.

El gobierno mexicano ha puesto en marcha una serie de cortometrajes para educar sobre igualdad y rechazar la discriminación por raza, cultura o género. En uno de ellos, por ejemplo, un estudiante no quiere jugar al fútbol con sus compañeras, que le recuerdan que siempre han sido amigos y que ese tipo de comportamientos no aportan nada positivo a la convivencia. Cada vídeo finaliza con un discurso sobre estos valores para que los estudiantes reflexionen en el aula.

Una divertida propuesta animada que para mostrar los beneficios del trabajo en equipo ha seleccionado a tres animales que dada su naturaleza tienden a actuar en grupo: el pingüino, la hormiga y el cangrejo.

4) Día y Noche ( Aprender a convivr con nuestros compañeros)

Teddy Newton es el director de este corto animado que trata sobre dos personajes muy curiosos que representan el día y la noche. Por ejemplo, cuando Día está feliz aparece un arco iris, mientras que en Noche aparecerán fuegos artificiales. Y aunque al principio se sienten incómodos juntos, con el tiempo aprenden a ver lo positivo del otro: como el día se convierte en noche y viceversa. Una historia para aprender a convivir con nuestros compañeros y quedarnos con las cosas buenas de los que nos rodean.

5) Easy life ( Esfuerzo, capacidad de superación y el sacrificio diario)

Creado por Jiaqi Xiong, trata sobre una niña que tiene una muñeca mágica que le hace los deberes. A partir de ese momento, ella deja de realizar su tarea para dedicarse a jugar con su consola, pero no todo es tan bonito como parece. Este corto de animación reflexiona sobre el esfuerzo, la capacidad de superación y el sacrificio diario.

6) Tamara (Superación personal)

Cuenta la historia de Tamara, una niña sorda que quiere convertirse en bailarina. A pesar de su incapacidad, la pasión por la danza corre por sus venas y aunque no pueda escuchar la música, la siente, sin que esto sea un impedimento para perseguir su sueño. Se trata de un verdadero ejemplo de superación personal y de que, al final, todo esfuerzo tiene su recompensa. Creado por House Boat Animation Studio.

7) El piano (El poder de la música)

Su autor Aidan Gibbons crea este corto animación durante su segundo año de licenciatura en animación en la Universidad de Hertfordshire (Irlanda). Trata sobre el poder de la música a través de la imagen de un anciano que a medida que va tocando una hermosa melodía en su piano va recordando su vida acompañado de su mujer, ya desaparecida. Es un ejemplo de cómo una simple canción puede hacer que revivamos el pasado. Fue nominado a mejor animación en Bradford Animation Festival en 2005 y ganador del premio del público durante el University Hertfordshire Film Day en el mismo año.

8) Cuerdas (La ternura, la amistad, la inocencia o la generosidad)

El guionista y director Pedro Solís García dirige esta pequeña obra de arte que ha sido reconocida recientemente con el Premio Goya 2014 al Mejor Cortometraje de Animación. La ternura, la amistad, la inocencia o la generosidad son algunos de los valores tratados.

En 2011 esta cinta consiguió el Oscar al mejor corto animado. Es una llamada de atención al estilo de vida que llevamos y que, muchas veces, no nos deja ver lo que le ocurre a las personas que tenemos alrededor, sus problemas… 

10) El alfarero 

El interés por hacer bien las cosas, la motivación, las ganas de emprender nuevos proyectos, de transmitir magia y unas cuantas dosis de amor en aquello que hacemos… son algunos de los temas planteados en este cortometraje que cuenta la historia de un maestro y su discípulo al que enseña a trabajar el barro.